RECOMENDAMOS AL LECTOR QUE CUALQUIER DUDA RELACIONADA CON LA SALUD, SEA SIEMPRE CONSULTADA A UN PROFESIONAL DE ÁMBITO SANITARIO
Desde la declaración del “Estado de Alarma”, la preocupación sobre nuestra protección ante el coronavirus ha crecido de forma exponencial. Si bien como Técnico Instrumentista o Luthier, sin ser experto en control de enfermedades (y este post no puede garantizarlo), he esbozado algunas recomendaciones generales sobre cómo desinfectar los instrumentos y mantenerlos lo más libre de gérmenes posibles. Esta situación obliga a que seamos más responsables en la limpieza y desinfección de nuestros instrumentos.
Diferenciemos que es una Esterilización y Desinfección
NINGÚN DESINFECTANTE ES UNIVERSALMENTE EFICAZ
El uso de productos antibacterianos, fungicidas o antivirales ha crecido de forma considerable. Hay productos que indican que su objetivo es la esterilización completa, pero tenemos que pensar que la esterilización al 100% es imposible, porque una vez el objeto ha salido de un proceso de esterilización, al ser de nuevo manipulado o expuesto al aire, ya se considera NO ESTÉRIL.
Si la esterilización no se puede mantener, podemos realizar una desinfección, que es la destrucción de la mayoría de los microrganismos patógenos de objetos inanimados. Desinfectamos mobiliario, suelo y otros, con productos generales como alcohol, lejía, etc.
La mayoría de los virus no pueden vivir en superficies durante un prolongado tiempo, incluso algunos se exterminan al contacto simplemente con la mera exposición del aire. Pero en cambio otros son bastantes resistentes.
Un estudio de The New England Journal of Medicine analiza la presencia del virus en acero, plástico, cartón y cobre. Usaron un dispositivo para dispensar aerosoles que simulaba las gotas creadas al toser y comprobaron que el virus permaneció en éstos durante el tiempo del estudio, unas 3 horas. Pero indica que en superficies metálicas, como acero inoxidable, o plástico permaneció 3 días, aunque la carga vírica se redujo considerablemente. En el cobre no se detectó el virus tras 4 horas y en cartón duró hasta 24 horas.
LA VIDA MEDIA ESTIMADA FUE APROXIMADAMENTE 5-6 Hs. EN ACERO INOXIDABLE Y 6-8 Hs EN PLÁSTICO
Con esto en mente, si su instrumento es manipulado por otra persona, una opción es ponerlo en “cuarentena” al menos el tiempo que este estudio revela, y comenzar a pensar que nuestra preocupación por la higiene del instrumento es fundamental.
¿Cómo podemos hacerlo para protegernos y mantener “limpio” nuestro instrumento?
Dado que la transmisión de bacterias y virus es una preocupación real en estas semanas, debemos adoptar un PROTOCOLO propio respecto a los instrumentos de música. Es muy posible que la forma habitual de manipulación y uso del instrumento cambie durante un tiempo. COMPARTIR un instrumento, boquilla o caña, solo un instante, debería ser una costumbre a evitar.
Desde esta consideración, se podría recomendar un nuevo Protocolo de uso para instrumentistas.
1. En zonas comunes, de paso general de personas, debería existir mínimo un gel antiséptico para manos, también llamado gel sanitizante o sanitario de manos. El lavado de manos se debe realizar un mínimo de 40 seg. La higiene de manos, antes de tocar cualquier instrumento es indispensable.
2. Cada músico debe usar su propio instrumento. Si se debe compartir, debe pasar por una limpieza-desinfección. Por lo que toallitas de alcohol isopropílico deben de estar disponibles. La limpieza a fondo, exterior e interior, es muy importante. Pero el músico debe entender desde ahora mismo que es esencial el mantenimiento general diario de su instrumento mediante el uso de sus tradicionales limpiadores o varillas de limpiezas ya que esto es necesario para evitar la acumulación de residuos dentro del instrumento.
3. El intercambio de cañas no es nada recomendable.
4. Las Boquillas, incluyendo también la cabeza de la flauta, tudeles de fagot, saxofón o corno inglés, son una de las partes más sensibles de la transmisión de las bacterias o virus ya que es la parte que está en contacto directo con nuestra boca.
LIMPIEZA DE LA CABEZA Y CUERPOS DE LA FLAUTA
- Un bastoncillo de oídos, humedecido en alcohol isopropílico (más desinfectante que el etílico) limpia el interior del orificio del bisel.
- Las toallitas de alcohol isopropílico pueden ayudar a desinfectar tanto el orificio del bisel como el propio bisel.
- Usa la varilla de limpieza de tu flauta, con una gasa o paño de seda para limpiar el interior del tubo. Una vez seco, pon un paño impregnado con un poco de alcohol isopropílico y vuelve a introducirlo para la desinfección final. No impregnes demasiado el paño en alcohol. Perseguimos que se humedezca, y no que escurra líquido. Si lo mojas demasiado, puede llegar a tocar las zapatillas dañándolas.
- Cuando limpies la mecánica, intenta no hacer contacto con las zapatillas. Pueden dañarse.
- Hazlo solo tú, para que seas la única persona que manipula el instrumento antes de guardarlo en su estuche.
LIMPIEZA DE TUDELES
- La limpieza del tudel debe ser realizada diariamente. Para ello usa tu limpiador indicado para el tudel. Si deseas realizar una limpieza más profunda, válete de una toallita humedecida en alcohol isopropílico para limpiar la superficie y el interior al que puedas acceder.
- Asimismo los tudeles deben ser limpiados profundamente cada mes, con una solución de agua jabonosa neutra y agua corriente.
- Semanalmente podemos realizar una limpieza más profunda del tudel de saxo, pero es necesario desmontar la llave de octavas del tudel. Si la has desmontado, puedes sumergir el tudel en agua templada jabonosa (usando jabón de manos neutro) para limpiar el interior. Puedes usar un cepillo dental para las partes más difíciles, pero con cuidado de no dañarlo. Enjuágalo bien con agua corriente. Para desinfectarlo por dentro, usa una toallita de alcohol isopropílico o impregna un paño de una disolución al 50% de Agua y Agua Oxigenada al 3%. Déjalo reposar durante 1 m, y vuelvea enjuagarlo con agua corriente. Sécalo y monta la llave del tudel.
- Los tudeles de Corno Inglés pueden ser limpiados usando un limpiapipas, agua jabonosa y bajo el chorro del grifo con agua corriente. Pero ten precaución de no dar el interior del tudel con el alambre que contiene el limpiapipas
LIMPIEZA DE BOQUILLAS DE EBONITA, PLÁSTICO Y METAL
Para boquillas de Ebonita o Plástico
Las boquillas de ebonita límpialas todos los días con un limpiador de boquillas, y semanalmente dales un lavado más profundo.
Para la limpieza semanal, usa un pequeño vaso, donde la boquilla entre de forma holgada. Colócala, con mucho cuidado para no dañarla, con la punta hacia abajo. Llena el vaso con una solución (al 50%) AGUA y AGUA OXIGENADA (3%) hasta que el líquido sobrepase la ventana de la boquilla. Evita que el corcho de la espiga (en el caso de boquillas de clarinete) no esté en contacto con la humedad.
Espera 15 m, sácala y retira cualquier residuo que se haya podido desprender de su interior. Enjuágala bien y sécala.
Para Boquillas de Metal
Las boquillas de metal pueden ser limpiadas y desinfectadas de igual forma que las anteriores, pero también se limpian bien con agua templada y jabón suave para lavar la cubertería, NO DETERGENTES. Usa un cepillo dental para las zonas más difíciles. La solución desinfectante (al 50 %) AGUA y AGUA OXIGENADA (3%) es segura también para las boquillas de metal.
Escogiendo un desinfectante para nuestro instrumento o boquillas
SIN IMPORTAR EL DESINFECTANTE ELEGIDO, ES CRUCIAL SEGUIR SUS INSTRUCCIONES. LOS DESINFECTANTES NO ELIMINAN LA SUCIEDAD, POR LO QUE LAS BOQUILLAS Y LOS INSTRUMENTOS DEBEN LIMPIARSE A FONDO DESPUÉS DE SU USO.
Soluciones desinfectantes para boquillas.
Estas soluciones desinfectantes están diseñados especialmente para una limpieza segura de boquillas de plástico, metal o ebonita.
Toallitas de alcohol isopropílico.
EL ALCOHOL ISOPROPÍLICO (>70%) PUEDE MATAR EL COVID-19, PERO NO SIEMPRE FUNCIONA BIEN CON SU INSTRUMENTO.
Es seguro para la mayoría de materiales usados en la construcción de los instrumentos de música. Pero el alcohol isopropílico no es conveniente usarlo en plásticos o maderas barnizadas ya que por su poder de limpieza puede decolorar o incluso dañarlo.
Solución al 50% de AGUA + AGUA OXIGENADA AL 3%
Esta solución puede ser usada en los materiales detallados anteriormente en la construcción de boquillas.
Lámparas UV-C
También conocidas como lámparas germicidas, las lámparas UV-C no son comunes fuera de laboratorios e instalaciones médicas, pero matan todo tipo de gérmenes y virus. Las más comunes disponibles en el mercado son las LED UV-C, que usan luces ultravioletas de onda corta para inactivar virus. A menudo se venden como varitas que puede mover sobre las superficies para desinfectarlos.
Es importante tener en cuenta que la exposición a la luz ultravioleta es terrible para nosotros: puede causar cáncer de piel, al igual que cualquier exposición prolongada al sol. Por eso, las instalaciones médicas que usan lámparas UV-C tienen procesos para prevenir la sobreexposición a los rayos UV, incluida la educación y la capacitación.
Pero bueno, si conoce a alguien con acceso a una lámpara UV-C que sepa cómo usarla de manera segura, es posible que desee pedirle ayuda. La exposición corta a una lámpara UV-C desinfectará sus instrumentos sin daños a largo plazo; sin embargo, la exposición a largo plazo puede darle a su instrumento una apariencia más envejecida, por lo que recomendamos una exposición limitada.
A estas alturas quizás te estés preguntando acerca de los rayos UV del sol. Esta forma no es considerada un método de desinfección efectivo, ya que no se garantiza que poner su instrumento al sol durante unas horas no mate un virus, y lo expone precariamente a los elementos. Las lámparas UV-C producen rayos UV intensos y específicos que son ideales para matar COVID-19 en un entorno controlado. Gracias al ozono que nos protege de demasiados rayos UV, no se obtiene con la luz solar.